1. El juez o tribunal podrá acordar el decomiso previsto en los artículos anteriores aunque no medie sentencia de condena, cuando la situación patrimonial ilícita quede acreditada en un proceso contradictorio y se trate de alguno de los siguientes supuestos:
a) Que el sujeto haya fallecido o sufra una enfermedad crónica que impida su enjuiciamiento y exista el riesgo de que puedan prescribir los hechos,
b) se encuentre en rebeldía y ello impida que los hechos puedan ser enjuiciados dentro de un plazo razonable, o
c) no se le imponga pena por estar exento de responsabilidad criminal o por haberse ésta extinguido.
2. El decomiso al que se refiere este artículo solamente podrá dirigirse contra quien haya sido formalmente acusado o contra el imputado con relación al que existan indicios racionales de criminalidad cuando las situaciones a que se refiere el apartado anterior hubieran impedido la continuación del procedimiento penal.
Art. 127 ter CP
¿Qué nos indica el Artículo 127 ter del Código Penal?
El artículo 127 ter del Código Penal establece la posibilidad de ejecutar el decomiso en determinados casos, incluso si no ha habido una sentencia condenatoria. El decomiso es una medida mediante la cual se confisca el patrimonio que se considera ilícito, es decir, aquel que ha sido obtenido de forma ilegal.
Este artículo contempla tres supuestos en los cuales se puede acordar el decomiso:
- Supuesto a: Este supuesto se refiere a la situación en la cual el sujeto objeto de investigación ha fallecido o sufre de una enfermedad crónica que le impide ser enjuiciado. Aquí se debe cumplir además el requisito de que exista el riesgo de que los hechos puedan prescribir, es decir, que se pueda perder la posibilidad de persecución penal debido al paso del tiempo.
- Supuesto b: Se presenta cuando el sujeto se encuentra en rebeldía, lo cual significa que no se ha presentado ante el tribunal o ha huido de la justicia. En este caso, el hecho de que esté en rebeldía impide que se pueda llevar a cabo el enjuiciamiento en un plazo razonable.
- Supuesto c: Este supuesto aplica cuando no se le impone una pena al sujeto investigado debido a que está exento de responsabilidad criminal o porque dicha responsabilidad se ha extinguido. Esto puede ser debido a diversos factores, como la prescripción de los delitos o la aplicación de una causa de justificación que exime al sujeto de culpabilidad.
Es importante resaltar que el decomiso solo puede dirigirse contra aquellos sujetos que han sido formalmente acusados o contra los imputados con respecto a los cuales existen indicios racionales de criminalidad. Esto significa que esta medida solo puede aplicarse cuando las situaciones mencionadas en los supuestos anteriores han impedido la continuación del procedimiento penal.
El Artículo 127 ter del Código Penal: explicación sencilla
El Artículo 127 ter del Código Penal es una norma que establece la posibilidad de confiscar el patrimonio ilícito en determinadas circunstancias, incluso si no se ha dictado una sentencia condenatoria. Para ello, se deben cumplir tres supuestos: el fallecimiento o enfermedad crónica del sujeto investigado que impida su enjuiciamiento, la rebeldía del sujeto que impida un proceso judicial rápido y la ausencia de pena debido a la exención de responsabilidad criminal o su extinción.
Este artículo busca prevenir que los sujetos investigados se beneficien económicamente de actividades ilegales, aun cuando no se haya dictado una condena contra ellos. De esta manera, se busca combatir el blanqueo de capitales y el enriquecimiento ilícito.
Es importante mencionar que el decomiso solo puede realizarse contra aquellos sujetos que han sido acusados formalmente o contra los imputados que cuenten con indicios racionales de criminalidad. Esto garantiza que la medida se aplique únicamente a aquellos casos en los que las circunstancias mencionadas previamente hayan impedido el desarrollo del proceso penal.
En conclusión, el Artículo 127 ter del Código Penal es una herramienta legal que permite la confiscación del patrimonio ilícito en casos específicos en los que el enjuiciamiento se vea obstaculizado por el fallecimiento o enfermedad del sujeto, la rebeldía o la ausencia de responsabilidad criminal. Esta medida contribuye a la lucha contra la corrupción y el delito económico en España.
¿Cuándo aplicaría el Artículo 127 ter del Código Penal?
El artículo 127 ter del Código Penal establece las condiciones en las cuales se puede llevar a cabo el decomiso de bienes en casos específicos, incluso si no se ha emitido una sentencia condenatoria. Es importante comprender en qué situaciones se puede aplicar esta medida y cómo funciona en la práctica.
En primer lugar, es fundamental tener en cuenta que el decomiso implica la confiscación de patrimonio que se considera ilícito, es decir, que ha sido obtenido de manera ilegal. Esta medida tiene como objetivo evitar que los sujetos investigados se beneficien económicamente de actividades delictivas.
El artículo 127 ter contempla tres supuestos en los cuales se puede acordar el decomiso:
- El supuesto a se refiere a la situación en la cual el sujeto investigado ha fallecido o sufre de una enfermedad crónica que le impide ser juzgado. Además, debe existir el riesgo de que los hechos puedan prescribir, es decir, que se pueda perder la posibilidad de enjuiciamiento debido al paso del tiempo.
- El supuesto b se presenta cuando el sujeto se encuentra en rebeldía, lo que impide que el proceso judicial se lleve a cabo de manera rápida. La rebeldía se produce cuando el sujeto no se presenta ante el tribunal o huye de la justicia.
- El supuesto c aplica cuando no se impone una pena al sujeto investigado debido a que está exento de responsabilidad criminal o esta responsabilidad se ha extinguido. Esto puede deberse a diversas circunstancias, como la prescripción de los delitos o la aplicación de una causa de justificación que exime al sujeto de culpa.
Es importante destacar que el decomiso solo puede dirigirse contra aquellos sujetos que han sido formalmente acusados o contra los imputados con indicios racionales de criminalidad. Esta medida se aplica en casos en los que los supuestos mencionados anteriormente han impedido la continuación del proceso penal.
Ejemplos de aplicación del Artículo 127 ter del Código Penal
1. Caso 1: Juan, un empresario conocido, es diagnosticado con una enfermedad terminal que le impide enfrentar un juicio penal por fraude financiero. Existe el riesgo de que los delitos prescriban antes de que pueda ser enjuiciado. En este caso, el decomiso de sus bienes ilícitos podría aplicarse según el Artículo 127 ter del Código Penal.
2. Caso 2: Marta, una persona investigada por blanqueo de capitales, se encuentra en rebeldía, evitando comparecer ante los tribunales y retrasando el proceso judicial. Su rebeldía impide que se lleve a cabo un juicio en un plazo razonable, por lo que podría ser sujeto de decomiso según lo establecido en el Artículo 127 ter.
3. Caso 3: Javier es acusado de una serie de delitos económicos, pero se demuestra que está exento de responsabilidad criminal debido a un defecto de forma en la acusación. En este caso, aunque no se le imponga una pena, su patrimonio ilícito podría ser decomisado de acuerdo con el Artículo 127 ter.
4. Caso 4: María es imputada por complicidad en un caso de corrupción, pero durante el proceso se determina que su responsabilidad se ha extinguido por haber colaborado con la justicia. Aunque no se le condene, su patrimonio ilícito podría ser objeto de decomiso según lo dispuesto en el Artículo 127 ter del Código Penal.
5. Caso 5: Carlos, un político investigado por malversación de fondos públicos, fallece antes de que se dicte una sentencia condenatoria en su contra. En este caso, si se demuestra la ilicitud de su patrimonio, este podría ser decomisado de acuerdo con el Artículo 127 ter.
Estos casos ejemplifican situaciones en las cuales el Artículo 127 ter del Código Penal podría aplicarse para confiscar patrimonio ilícito en circunstancias específicas. Es importante tener en cuenta que esta medida busca combatir la impunidad de los delitos económicos y garantizar que aquellos que se beneficien de actividades ilícitas no puedan disfrutar de sus ganancias de manera impune.