Es circunstancia que puede atenuar o agravar la responsabilidad, según la naturaleza, los motivos y los efectos del delito, ser o haber sido el agraviado cónyuge o persona que esté o haya estado ligada de forma estable por análoga relación de afectividad, o ser ascendiente, descendiente o hermano por naturaleza o adopción del ofensor o de su cónyuge o conviviente.
Art. 23 CP
¿Qué nos indica el Artículo 23 del Código Penal?
El Artículo 23 del Código Penal establece una circunstancia que puede atenuar o agravar la responsabilidad penal de una persona, dependiendo de la naturaleza, motivos y efectos del delito. Esta circunstancia se refiere a la relación que exista entre el agraviado y el ofensor, ya sea como cónyuge o como una persona que esté o haya estado ligada de forma estable por una relación de afectividad similar a la conyugalidad. También se considera una circunstancia agravante si el agraviado es ascendiente, descendiente o hermano por naturaleza o adopción del ofensor o de su cónyuge o conviviente.
El Artículo 23 del Código Penal: explicación sencilla
El Artículo 23 del Código Penal establece que la relación entre el agraviado y el ofensor puede influir en la responsabilidad penal de este último. Si el agraviado es o ha sido el cónyuge del ofensor, o si existe una relación de afectividad análoga a la conyugalidad, esto puede atenuar o agravar la responsabilidad del ofensor. Del mismo modo, si el agraviado es ascendiente, descendiente o hermano del ofensor, o de su cónyuge o conviviente, esto también puede influir en la responsabilidad penal.
En otras palabras, si el delito se comete en contra de una persona con la que el ofensor tiene una relación de pareja estable o una relación de parentesco cercano, esto puede ser considerado como una circunstancia que aumenta la gravedad del delito, lo que conlleva a una mayor pena. Por el contrario, si la relación entre el agraviado y el ofensor no es cercana o no existe una relación de parentesco, esto puede atenuar la responsabilidad penal y reducir la pena impuesta.
Es importante destacar que la influencia de estas circunstancias en la responsabilidad penal no depende únicamente de la relación en sí misma, sino también de la naturaleza, motivos y efectos del delito. Esto significa que factores como la violencia, el abuso o los daños causados pueden tener un impacto en la consideración de esta circunstancia por parte del tribunal.
Para tenerlo claro y a modo de síntesis, el Artículo 23 del Código Penal establece que la relación entre el agraviado y el ofensor, ya sea cónyuge o persona con una relación de afectividad similar a la conyugalidad, o si existe un vínculo de parentesco cercano entre ellos, puede influir en la responsabilidad penal y en la gravedad del delito cometido. Esta circunstancia puede atenuar o agravar la responsabilidad penal, dependiendo de la naturaleza, motivos y efectos del delito en cuestión.
¿Cuándo aplicaría el Artículo 23 del Código Penal?
El Artículo 23 del Código Penal se aplicaría en casos donde la relación entre el agraviado y el ofensor sea relevante para determinar la responsabilidad penal de este último. Por ejemplo, si el delito se comete en contra de la pareja estable del ofensor, ya sea cónyuge o persona con una relación de afectividad similar a la conyugalidad, este artículo entraría en juego. De igual manera, si el agraviado es ascendiente, descendiente o hermano del ofensor, o de su cónyuge o conviviente, esta circunstancia también sería considerada.
Es importante tener en cuenta que la naturaleza, motivos y efectos del delito son fundamentales para determinar si el Artículo 23 del Código Penal se aplica en un caso específico. Por ejemplo, si el delito cometido involucra violencia, abuso o daños graves, la relación entre el agraviado y el ofensor podría influir en la gravedad del delito y en la pena impuesta.
Ejemplos de aplicación del Artículo 23 del Código Penal
- Violencia de género: Cuando una persona comete un delito de violencia de género contra su pareja o ex pareja, se podría aplicar el Artículo 23 del Código Penal. La relación de pareja estable o la relación de afectividad análoga a la conyugalidad entre el agresor y la víctima influiría en la responsabilidad penal del agresor.
- Abuso de menores: En casos de abuso de menores por parte de un familiar, como un ascendiente o un hermano, el Artículo 23 del Código Penal podría ser aplicado. La relación de parentesco cercano entre el agresor y la víctima es una circunstancia que puede agravar la responsabilidad penal del agresor.
- Homicidio: Si una persona comete un homicidio en contra de su cónyuge, pareja o algún familiar cercano, la relación entre el agresor y la víctima sería tomada en cuenta según el Artículo 23 del Código Penal. Esta relación podría influir en la gravedad del delito y en la pena impuesta al agresor.
- Robo con violencia: En caso de un robo con violencia cometido contra un familiar cercano, como un hermano o un ascendiente, la relación de parentesco entre el agresor y la víctima podría ser considerada como una circunstancia agravante según el Artículo 23 del Código Penal.
- Lesiones: Si una persona causa lesiones a su cónyuge o a una persona con la que mantiene una relación de afectividad similar a la conyugalidad, esta relación podría ser un factor a tomar en cuenta para determinar la responsabilidad penal del agresor, de acuerdo con el Artículo 23 del Código Penal.